“… a Hélène, si aún le gusta algo en esta vida, es tener la casa bien abastecida de paños: paños para limpiar, para arropar, para refrotar, para envolver un regalo, paños para dar calor, paños perfumados con la lavanda que ahuyenta a las polillas, paños para arrebujar recién nacidos, paños para envolver los cuerpos amados cuando yacen enfermos, paños para vendar, enfajar, cubrir, liar, amortajar, envolver, adornar, paños para festejar la vida y disimular la muerte, paños para admirar por los retoques, las puntillas, los bordados, los tejidos, paños limpios, blanquísimos, suaves, paños para acariciar con la punta de los dedos no se vayan ensuciar, paños cariñosos para que con su tacto suave Hélène se haga la illusion de que la están tocando otra vez.”
Teresa Moure (2008), Hierba mora, Delbolsillo, Barcelona, p.132, 133
("... if there is something Hélène still enjoys in this life, it is having the house well stocked with cloth: cloth for cleaning and covering, cloth to rub things down with and to wrap a present, cloth to give warmth, cloth scented with lavender to repel moths, cloth to swaddle new born babies, cloth to wrap around the bodies of loved ones when they lie ill, cloth to bandage, to girdle, to cover, to tie, to shroud, to wrap and to adorn, cloth to celebrate life and to hide death, cloth to admire the finishing touches, the stitches, the embroideries and the fabrics, clean cloth, very white and soft, cloth to caress with the finger tips not getting dirty, so that Hélène can imagine herself being touched again.”)